El pasado 30 de marzo fallecía a los 64 años Robert Z´Dar, de un aparente paro cardíaco. Mucho más conocido por su peculiar físico que por su nombre (padecía una extraña enfermedad denominada «querubismo», que le atavió con una mandíbula desproporcionada), es uno de los símbolos del cine fantástico de los 80 desde que se pusiese en la piel de Matt Cordell, el iconográfico villano de la saga «Maniac Cop» orquestada por William Lustig. Z´Dar consiguió añadir una fisonomía y estilo muy peculiares a Cordell, llevando un paso más allá las maneras de ejecutar el poderío físico del villano dentro del slasher. Además de interpretar este papel en las tres entregas de la saga, su peculiar rostro también es conocido por aparecer en «Tango y Cash» (íd, Andrey Konchalovskiy, 1989), «Gnomo Cop» (íd, Stan Winston, 1990), «Soultaker» (íd, Michael Risi, 1990), o»Samurai Cop» (íd, Amir Shervan, 1991), aunque su figura ha estado ligado a la Serie B hasta el día de su muerte (seguía rodando varias películas al año, aunque prácticamente todas de segunda fila). Se va un icono, querido y adorado, que supo transmitir con su imponente físico de 1 metro y 88 centímetros la monumental presencia de Matt Cordell, el policía fantasmogórico y siniestro por el que siempre será recordado. Su compañero de reparto en las dos primeras entregas de «Maniac Cop», Bruce Campbell, le recordaba con enorme cariño desde su cuenta de Twitter. Sigue leyendo