Semana aciaga para Rob Zombie. Si hace unos pocos días adelantaba a través de su Facebook la muerte de uno de sus actores fetiche, Tom Towles, ahora daba a conocer a sus seguidores el fallecimiento de otro de sus colaboradores: Geoffrey Lewis, para quién reservó un relevante papel en «Los Renegados Del Diablo» (The Devil´s Rejects, 2005) como uno de los miembros de la banda de country Banjo & Sullivan, además de prestar su voz a uno de los personajes de su ambicioso proyecto de animación llamado «The Haunted World of El Superbeasto» (íd, 2009). Lewis fue uno de los rostros más conocidos por el gran público durante las décadas de los 70, 80 y 90, siendo un habitual colaborador de Clint Eastwood durante esas décadas («Infierno de Cobardes» [High Plains Drifter, 1973], «Bronco Billy» [íd, 1980], «Medianoche en el jardín del bien o del mal» [Midnight In The Garden Of Good and Evil, 1997]…), y para el que Lewis ofreció una multitud de papeles secundarios. En esta diatriba de amplificar y glorificar la interpretación secundaria destacó sin paliativos en cintas como «Dillinger» (íd, 1973) o «El Viento y el León» (The Wind and The Lion, 1975), ambas bajo la dirección de John Milius. Con una amplia producción televisiva a sus espaldas y una modesta carrera musical paralela, no podría decirse que su abultada filmografía estuviese copada de grandes aportaciones al cine fantástico, pero sí participó en algunos títulos de cierta celebridad en el género como «El Cortador de Cesped» (The Lawnmower Mann, Brett Leonard, 1992) y «Zombies» (Wicked Little Things, J.S. Cardone, 2006) entre otras, o aproximaciones como el psicotrópico western «Blueberry, la experiencia secreta» (Blueberry, Jan Kounen, 2004). Era el padre de Julliette Lewis, además de otros nueve hijos. Sigue leyendo