En esta segunda nueva época dorada que parece estar viviendo el mundo del fanzine cabe destacar una de las publicaciones que más fiel se ha mantenido a su cita con el aficionado al cine de género secundario y underground. El Buque Maldito, comandado por Diego López (también principal responsable de la sección Brigadoon del Festival de Sitges) desde aquel primer número salido en el año 2005, resiste con la reivindicación del papel en formato escrito rescatando productos y personas que han catapultado estas cinematografías más oscuras al templo del culto, pero ante todo impregnándolo de algo que sin duda contagiará al lector: la pasión hacia este tipo de cinematografía. Hace escasas semanas sale el número 27 de esta ya dilatada publicación, cuyos contenidos se analizan a continuación:
Bernard Seray
El fanzine se inicia con una divulgativa e interesantísima entrevista que Diego López le hace a Bernard Seray, infatigable rostro de los últimos tiempos del cinemabis español. Así, a través de las propias palabras del actor se repasan sus años como rostro anexo al cine quinqui de la época (bajo las órdenes de realizadores de la importancia de Ignacio F. Iquino, José Antonio de la Loma, entre otros), ocasión que Seray aprovecha para expresar su óptica personal hacia este subgénero, sus aportaciones como intérprete y recordando además multitud de anécdotas referente a las producciones. El actor hará lo propio acerca de algunas de otras películas en las que ha participado, haciendo especial hincapé en su recordada presencia en Apocalipsis Caníbal de Bruno Mattei (1980, película la que por cierto el fanzine tiene reserva su contraportada) o La Miel del Diablo (1986) de Lucio Fulci. Una conversación muy interesante y que supone el recuerdo vivo de aquellos fascinantes años para el cine de géneros español en la piel de uno de sus más añorados participantes.
Flor de Santidad
Diego López analiza y repasa el film Flor de Santidad (1973), cinta considerada toda una rara avis dentro del cine español de los años 70. Drama rural con claras ínfulas hacia el fantástico, en ella una eminencia teatral como Adolfo Marsillach ofrecía su único largometraje como director basándose directamente en una obra de Ramón del Valle-Inclán con un historia que nutre su epicentro dentro de la Galicia profunda; un enigmático peregrino llega a un ambiente rural decadente y enfermizamente supersticioso, para ser considerado todo un enviado del mismísimo Satanás. En este análisis se desgranan de manera bastante divulgativa todas y cada una de las particularidades el film, tanto en lo meramente cinematográfico como en sus interesantes datos de producción. Un rescate necesario de una de las obras menos conocidas del fantaterror hispano, que parece sufrir en los últimos tiempos una merecida reivindicación.
Lone Fleming
Una nueva entrevista y en esta ocasión a otro de los rostros más reconocibles e icónicos del cine fantástico español. Se trata de la danesa Lone Fleming, aupada al culto más apasionado gracias principalmente a sus trabajos con Amando de Ossorio. Diego López entrevista a la actriz haciendo un profundo repaso a su filmografía, con sus películas más representativas y su relación con directores del talante del propio Ossorio, Juan Piquer Simón o el mismísimo Lucio Fulci. Así, saldrán a la palestra los más recordados trabajos de la actriz como La noche del terror ciego (1971) y su secuela El ataque de los muertos sin ojos (1973), Una vela para el diablo (1973, dirigida por su marido Eugenio Martín), Mal de ojo (1975), Los Cuatro del Apocalipsis (1975) o Viaje al centro de la tierra (1977), entre otras muchas que hacen de Lone todo un recuerdo viviente de la eclosión del cine de géneros de nuestro país. La recta final de la entrevista se dedica casi en exclusiva a la segunda juventud que parece estar viviendo la actriz, gracias a nuevos proyectos que rescatan y reivindican su importante peso en el fantaterror patrio.
Sexy Cat
Otro título que se rescata y se analiza es Sexy Cat (1973), obra de Julio Pérez Tabernero que tiene la particularidad de basarse en una obra llamada ¿Quién era Cat?, bolsilibro del imprescindible escritor pulp Curtis Garland (o Juan Gallardo Muñoz). Confeccionado por José Luis Salvador Estébenez, este repaso abarca tanto la obra original (y su curioso uso de la metaficción), como la ubicación genérica del film de Tabernero, concebida a rebufo de las corrientes imperantes en el cine de género de entonces, deduciendo latentes influencias de los gialli, el fumetti o el spy. Sexy Cat, a pesar de sus claras limitaciones, supone un vehículo perfecto para repasar este tipo de adaptaciones a la gran pantalla en un contexto tan artísticamente efusivo como el cinemabis, añadiendo la relevancia que esta traslación, ya desde el material original, tiene el mundo del cómic. Protagonizada por Germán Cobos, Dianik Zurakowska y Lone Fleming, Sexy Cat es un film que hace residir encanto en sus puntos de partida más que en el desarrollo del contenido, como indica Salvador Estébenez en este completo repaso.
Los Escondites. Fábula atípica
El Buque Maldito dedica también espacio a Los Escondites (1969), otra de esas rara avis de nuestra cinematografía, auspiciada a finales de los años 60 cuando el cinemabis español comenzaba a coquetear muy seriamente con el cine fantástico. Diego López escribe un texto sobre la película, una de las llamadas cintas malditas paridas en nuestro país, rodeada ya con muchísimos contratiempos desde su producción que impedirían incluso un estreno comercial. Sus peculiaridades y su tono complejo fueron quizá los culpables del rechazo sufrido por el film desde sus propios productores, en una historia que basándose en la premisa de la casa encantada y el ahora más recurrido vínculo de los niños con lo sobrenatural, crea una iconografía perturbadora y de una complejidad muy poco habitual en el entonces inminente fantaterror.
Jesús Yagüe
El texto previo funciona en realidad como una presentación de la entrevista que el propio Diego López realiza al director de Los Escondites. Como es de esperar, ello supondrá un recorrido por el origen del film, detalles concretos de su triste problemática en la distribución, el polémico pase en el festival de Benalmádena, los supuestos apuntes autobiográficos venidos desde el guión, así como diversas anotaciones sobre su producción, lo atrevido de su tono para la época y la posterior carrera de Yagüe como cineasta. Un más que interesante recorrido por una de las piezas más ocultas del cine español a través de la óptica de su realizador.
Muertos y Enterrados: la rareza convertida en título de culto
En la recta final de este número 27 se deja espacio para una película más conocida, pero no por ello menos adorada por los amantes del cine fantástico de índole underground. Javier Parra analiza Muertos y Enterrados (1981) de Gary Sherman, una mezcla entre el terror desgarrador de aquel tiempo con unos confesos ecos del sci-fi clásico, hálito pulp mediante. Parra desmenuza las más recordadas particularidades de la película, convertida hoy en un clásico del género, en esta historia de una oleada de muertes que asolan de misterio una preciosa localidad costera llamada Potter’s Bluff. En el análisis nos encontraremos disertaciones sobre la utilización de preceptos tan ligados al horror como el mad doctor, la anexión de su turbiedad escénica a algunos de los estatus clásicos de la ciencia ficción, la multitud de influencias en su desarrollo, su posterior influencia de algunos de sus iconos (como la ya inolvidable enfermera interpretada por Lisa Blount), así como el repaso a algunos de los nombres que han trabajado en la película y con posterior importancia en el futuro.
Gary Sherman
El colofón final del fanzine supone la entrevista que Xavi Sánchez Pons realiza al director de Muertos y Enterrados en el enclave del Festival de Cine de Terror Sabadell, al que el propio Sherman pudo asistir. Un extenso e informativo recorrido a través de los orígenes del interés del director por el género, los primeros contoneos como cineasta (con unas primeras intenciones de ser director de fotografía), su periplo por Londres (tras tener que emigrar de su originaria Estados Unidos), para luego entrar de lleno en una filmografía compuesta por Sub-humanos (1972), su desconocido pero también reivindicado debut, Muertos y Enterrados, de la que Sherman detallará interesantes anotaciones como la polémica con la firma del guión, la concepción de la atmósfera, su trabajo con Stan Winston o la actriz Lisa Blount. Finalmente, habrá espacio para Poltergeist III (1988), donde el director también hizo sus pinitos en los efectos especiales, con la necesaria mención a la leyenda negra que rodeó siempre a la saga y un sentido recuerdo a las actrices Zelda Rubinstein y Heather O’Rourke. Una entrevista directa y sincera, que demuestra el carácter afable y profesional con el que Sánchez Pons describe a Sherman justo al inicio de esta sección.
Un capítulo más del recorrido que poco a poco va generando El Buque Maldito a través de una reivindicación hacia el cine de culto más oscuro y underground, que desde estos lares merece todo respeto y admiración. Recuerde, querido lector: para información y pedidos de este imprescindible fanzine pueden ponerse en contacto en la siguiente dirección: elbuquemaldito_zine@hotmail.com
Saludos desde el Gabinete.