Blue Öyster Cult fue y es una de las bandas más destacadas y reivindicables dentro del panorama rockero de los 70, en aquel sector donde muchos de los grupos emergentes de la época se atrevían a ser imbuidos por el encanto de la psicodelia. Un tema con ampulosa notoriedad fue su archi-conocido «(Don´t Fear) The Reaper«, ensalzado en multitud de ficciones cinematográficas y televisivas (John Carpenter lo incluyó en su «La Noche de Halloween» y Rob Zombie haría lo propio en el remake de esta) y cuestionado por sus siniestros aromas de romanticismo fatalista (Romeo y Julieta no escapan en su mención), se convertía en el mayor éxito de la banda. Liderados por los carismáticos Eric Bloom y «Buck Dharma» Roeser y con cambios casi constantes en su formación, supieron construir un universo propio en sus canciones con grandes connotaciones hacia la fantasía, la ciencia ficción o los coqueteos poéticos provenientes de su habitual colaborador Sandy Pearlman (él fue, además, quien les sugirió el nombre actual del grupo a cambio del original Soft White Underbelly). Aquel L.P. de 1976 llamado «Ages Of Fortune«, quizá el más importante de su carrera, ofrecía las riquezas melódicas del heavy metal y el hard rock dentro de las habituales habilidades artísticas hacia los arreglos vocales y la imponente psicodelia, dejando a un lado los retazos glam de sus orígenes. Con «(Don´t Fear) The Reaper» atronando constantemente las radios del momento, en el segundo tema de la Cara B del disco se encontraba «Tattoo Vampire«: contundentes riffs de guitarra y sinuosas líneas de bajo, que ofrecían un en su estribillo uno de los momentos más memorables de «Ages Of Fortune»:
I went down last night with a tattoo madam
To a nude dagger fantasy domain
Wrapped in hell, I lost my breath
Chest to stimulating chinese breast
Grisly smiles, that don’t flake off
Corny-colored demons leering
Vampire photos, sucking the skin
Seeding the night at the inker’s parlor
Flash permabrand pricked for a dollar
Her wrist surreal a heart and flying skull
Lettered Life and love pass swiftly
Grisly smiles, that don’t flake off
Corny-colored demons leering
Vampire photos, sucking the skin
Cordiales saludos desde el Gabinete.