En la primera parte de este artículo introductorio al Slasher nos habíamos quedado justo en el momento en el que se puede catalogar el estallido comercial de este apasionante subgénero: el estreno en 1978 de La Noche de Halloween, el modesto film de John Carpenter que expondría y ampliaría enormemente las más representativas claves del mismo. Partiendo de una clara influencia como fue el esquema argumental de Navidades Negras de Bob Clark, Carpenter potencia hasta el extremo la utilización de una trama sencilla (un pequeño vecindario que sufrirá los crímenes de un villano) pero que gracias a una serie de conjunciones puramente fílmicas se convertiría en todo un clásico del terror. Asentando los que se considerarían muchos de los patrones básicos del Slasher, que ya venían dándose con anterioridad pero que el cineasta aquí los estandariza (víctimas adolescentes, localización aislada, villano enmascarado…), sumándole una elegante articulación narrativa (ya presentado con el plano secuencia de inicio y su maravilloso uso del formato panorámico), impropia de estas temáticas, y con un reparto que incluía a una vieja estrella de Hollywood como Donald Pleasence y la presentación al mundo de Jamie Lee Curtis, quien sobre ella recae la responsabilidad de establecer las coyunturas de lo que a partir de aquí se empezó a llamar como final girl. Sigue leyendo
Final Girl
Express Reviews: «Hush», «La Invitación», «Last Girl Standing», «Perros Rabiosos»
Hush (íd, Mike Flanagan, 2016)
Llevando el esquema de la home invasion a todo su metraje, Hush relata el desasosiego y desesperación de una joven escritora sordomuda que sufrirá el acoso de un misterioso hombre enmascarado en su aislada morada. Si algo se le puede reconocer a la película es la confección de una tensión medida y moderada bajo la batuta del sello personal de su director, Mike Flanagan, aunque como ocurriera en su previa y aplaudida Oculus el film se derrumbará por su condición de buena premisa alargada en un guión lleno de secuencias estériles, así como de una atmósfera mucho menos perturbadora de lo que puede dar el subgénero de los crueles allanamientos de morada imprevistos. Sigue leyendo
Dossier Slasher: Introduciendo un género. Máscaras, cuchillos y gritos en la oscuridad… (1)
Si dentro de las abultadas variantes del cine de terror existe una corriente que se haya mantenido con el paso del tiempo, aún teniendo en cuenta diversas decadencias y renovaciones, es el slasher. Con él se cumplen muchos de los patrones que establecen y dan forma a los subgéneros del cine fantástico, como bien pudieran ser unas influencias previas formales, una serie de obras prototípicas que darían pie a unos patrones que luego desarrollarían unos cineastas dando pie a sus tótems, además de la consecución de un movimiento anclado a una época determinada, que provocaría una futura explotación comercial y decaimiento. Aunque entraremos luego en ello, el slasher ha sufrido varios ocasos que no impedirían que fuese eternamente recurrido en los cánones de la serie B, destacando eso sí una explosión comercial que tendría en los años 80 su auténtico culmen. Sigue leyendo
Tú eres el siguiente (Adam Wingard, 2011)
Tú eres el siguiente fusiona no sin cierto maniqueísmo la invasión doméstica con el slasher, subgénero anclado perpetuamente al cine de terror y cuyo mecanismo parece totalmente desgastado salvo honrosas excepciones. Adam Wingard, uno de esos enfant terribles del nuevo cine de terror norteamericano, construye la eterna y reiterada propuesta del grupo de supervivientes ante una amenaza exterior, siendo esto una influencia clara y confesa del cine de John Carpenter quien nutrió esta vertiente en base a su amor por Rio Bravo (1959) o La Noche de los Muertos Vivientes (1968). El film de Wingard se ha proclamado como una de las películas estrella de la pasada temporada, auspiciada por un supuesto retorno al slasher en su faceta más vintage. Sigue leyendo